Flor: Flores hermafroditas, blancas, de entre 8 y 10 mm de largo (máximo 20 mm), divididas en dos labios que forman un tubo en la base: el labio inferior es amarillento y está curvado. Se disponen formando anillos alrededor de los tallos.
Planta: Mata perenne, de hasta 50 cm de altura, pilosa, leñosa y ramificada desde la base, con tallos erectos. Hojas enfrentadas (opuestas), de 1 a 3,5 cm de largo, sin pecíolo, peludas y con el margen aserrado.
Muy variable. Desde mediados de marzo hasta el final de mayo (a veces, final de junio).
Polen: muy poco.
Néctar: bastante.
Flor polinizada principalmente por abejas, pero también la visitan hormigas y avispas.
Sideritis viene del griego sideros, que quiere decir “hierro” e hirsuta hace referencia a la abundante pilosidad de los tallos.
Los griegos usaban las plantas de este género para curar las heridas hechas con armas e instrumentos de hierro.
Hoy también se usa para desinfectar y cicatrizar heridas y en tisanas para facilitar la digestión.
Son ricas en esencias con aroma de limón.
Este género alcanza su máxima diversidad en la Península Ibérica.